sábado, 23 de abril de 2011

Sexta lágrima: Cuando no quieras recordarás

Cuando te duela o cuando no te duela,

cuando la eches de menos o cuando pienses en alguien que no hayas conocido, recordarás;

cuando estés cansado y vayas a dormir, justo antes de que el sueño cierre tus párpados, recordarás;

porque nunca dejarás de hacerlo si algo late debajo de tu pecho.

Y te dolerá, como nada te ha dolido, como nunca hubieras imaginado;

cuando ya no puedas soportar más dolor, te dolerá aún más;

porque no estás listo para no conocerla, para vivir sin ella;

ni siquiera sabes si existe y ya sufres por ella.

Puede que esté ahí, cerca de ti, a un metro de tu cuerpo pero si no sabes que es ella un centímetro es un millón de kilómetros;

cuando creas que estás vacío, que nada te rellena por dentro, sabrás que no es así;

lo sabrás por los latigazos de dolor de tu corazón, tu cuerpo es la tierra y tu corazón el sol:

todo gira en torno a él y no puedes cambiar sus leyes.

No controlas nada, sólo intentar.

Si algún días puedes ir una a una borrando estas palabras, de soledad, de dolor, serás más feliz de lo que yo lo he sido.

Sólo hay una forma de borrarlas todas, sólo hay una forma de ser feliz, de sentir bajo tu cuerpo.

Saber que es ella.